sábado, 27 de febrero de 2010

Por favor dejame hablarte son solo cinco minutos una hora, no sé solo pido que me dejes hablarte, si ya se ya se que ya sabes de lo que voy a hablarte, que otra vez siempre lo mismo, ya sabes pero dejame, son solo cinco minutos que te hace, dejáme dejáme. No por favor por favor no me dejes no me dejes, no me entendes. Si no digo que no me entiendas, no, no estoy diciendo, no te trato de estúpido ni nada de... ¡Dejame que te diga una vez más por favor! Que algún día vas a ver, vas a querer y yo voy a estar en otra, ¿entendes? No que cursi que que mierda, anda a cagar, que sos la reina Isabel, andáte a la puta que te parió. Yo nada mas te pedía cinco minutos de tu vida para que vuelvas a escuchar las estúpidas lágrimas de una estúpida llorona de siempre. Pero sabes que me tenés podrida metete los cinco minutos y tu vida reloj en el medio del orto, y que cages fuego pelotudo, si al final haces como media hora que hablamos boludeces y todavía no te dije nada de lo que quería decirte, que que ya ni me acuerdo que te extraño y que lloro, que alguna pelotudes de esa, pero ya fue viste. Que, quien es, que acá no vive ningun chico que con ese nombre. Ah disculpe eh, bueno si ya, bueno disculpe ya le dije disculpe bueno váyase un poquito... anda a cagar. Nadie me entiende. Y bue son todos putos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario